Para México el comercio exterior representa cerca del 78% del PIB nacional, por lo que estas actividades, así como toda la logística y gestión que las rodean son de suma importancia para el desarrollo de la economía nacional.
Una actividad tan grande e importante para el país requiere de leyes e infraestructura adecuada para dar abasto a todas las operaciones de importación y exportación, así como equipo y espacio que se destinará para atender estas operaciones, y es de eso de lo que te queremos hablar en este artículo, específicamente de los Recintos Aduaneros.
El recinto fiscal es el territorio donde las autoridades realizan todos los movimientos administrativos necesarios, así como los muelles, depósitos, campos de aterrizaje, etc.
Este espacio es donde se lleva a cabo la parte operativa de las importaciones y exportaciones, por lo tanto, dentro de sus funciones destacan:
Una de sus características más importantes es que este recinto está administrado exclusivamente por las autoridades aduaneras, es decir, que son parte del gobierno mexicano.
No, no son lo mismo, el recinto fiscalizado, por su parte es un inmueble que se ubica dentro del recinto fiscal, el cual es administrado por organismos particulares con autorización del Servicio de Administración Tributaria (SAT), el cual les permite llevar a cabo las funciones de:
Los recintos fiscalizados pueden ser cualquier terminal donde se realicen maniobras de carga y descarga de contenedores del extranjero, además de que, si no están dentro del recinto fiscal, suelen estar cerca de recintos portuarios, aduanas marítimas, fronterizas, o aduanas interiores.
Si quieres tramitar la autorización vas a necesitar la siguiente documentación:
Además, se requiere del RFC y e.firma de la persona física o moral que presente la solicitud, así como estar al corriente en el cumplimiento de sus obligaciones fiscales.
El trámite tiene un costo total de $63,964.00 MXN, pero cambia cada año y se publica el nuevo costo en el anexo 19 de la Resolución Miscelánea Fiscal.
Para realizar el trámite se puede mandar un escrito o presentarlo a la Administración Central de Apoyo Jurídico de Aduanas obteniendo respuesta en un lapso de 3 meses después de presentar la solicitud.
Si, no son dos, sino tres, y al igual que el recinto fiscalizado es administrado por organismos particulares con la autorización del SAT y realiza las mismas funciones, pero, a diferencia del normal, el recinto fiscalizado estratégico está ubicado dentro de las instalaciones de la aduana y tiene su propio régimen aduanero, el cual le permite introducir mercancía ya sea nacional, extranjera o nacionalizada, pero por tiempo limitado.
¿Cómo obtener la autorización para un recinto fiscalizado estratégico?
De igual forma se requiere RFC Y e. firma de la persona que presente la solicitud, y estar al corriente en el cumplimiento de sus obligaciones fiscales. Este trámite tiene un costo de $73,574.00 MXN.
En resumen, son tres recintos aduaneros distintos que tienen el mismo propósito respecto al manejo de mercancías provenientes del extranjero, sin embargo, cambia la administración, ya que el recinto fiscal pertenece a las autoridades aduaneras y el recinto fiscalizado a la iniciativa privada.
Mientras tanto, la principal diferencia entre el recinto fiscalizado normal y el estratégico radica que este último cuenta con su propio régimen y está ubicado dentro de la aduana.
Recuerda que cada parte de la organización y logística para el desarrollo de las actividades de comercio exterior son importantes para llevar a cabo tu operación con éxito.
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